.../...Amaru CastelA



No hay a quien responder

ni a quien alzar la mirada,



se abre la puerta del entierro

y solo las más depravadas acciones impregnan sus rasgos desvirtuados.



Los más hondos instintos hieren al sol, la puerta se abre y el aire deja escapar la oscuridad, los gemidos, dolor retenido, consumado, ignorado.



La misericordia se quedó en los girones, la compasión se deletrea en un periódico de otro siglo. El amor juega tras los vidrios del jardín de la casa olvidada, la alegría se ha ido lejos, a otros barrios.



Declina el tormento y alivia la calma con dolor, con angustia. Una pequeña bestia me arrastra al centro del jardín…

Tan distinta, tan lejana a todo esto, una serpiente encanta al siseo del color, excita la curvatura de oriente y enamora indiferente con deseo al amor. No me mira y son sus ojos lo que más quiero, no sabe que existo y el anhelo de poblar su piel, de recorrer su estrechez es todo lo que tengo


Por fin, ya en el desvarío de tanto ensueño su mordida quiebra el hielo de papel y agua sanguínea que es mi pecho, gira la rueca a mi alrededor y sus agujas de zigzag me siguen penetrando mientras yo penetro su mundo, a su inferior túnel tornasol. El éxtasis no puede más, desciende frenético en sus ojos que se alejan arrastrada por su simiente.


Otra madrugada a la espera, los pasos se acercan, rechina la puerta e inicia la agonía de la víspera sin esperanza.






Amaru CastelA

QUITO - ECUADOR



Comentarios

Publicar un comentario

Si eres tan amable, deja tu comentario.

Entradas populares de este blog

EL GUSANO Y LA MARIPOSA/Ana Palacios

LA FÁBULA DEL CUERVO, EL LOBO Y LA SERPIENTE

SIN ESCAPATORIA/Estrella Amaranto